sábado, 5 de enero de 2013

Sobre la dominacion


Daré mi opinión desde el punto de vista de sumisa sobre mas o menos lo básico de la dominación.

Una persona Dominante es la que lleva la batuta en estas relaciones, es quien posee el poder, cedido por voluntad propia de parte de la persona sumisa. 
A mi parecer, una persona Dominante en primera estancia nace, no se hace, hay ciertas características que son innatas en un buen Dominante, que si no se tienen no funcionará igual. En segunda estancia un Dominante se hace por voluntad propia,crece, aprende y se instruye, pues para estas prácticas se tiene que tener ciertos conocimientos, leer y practicar es la mejor manera de ser un buen Dominante.

“Los Amos dentro del contexto BDSM son personas que mientras les sea de su agrado y puedan hacerlo, velarán por el bienestar físico y psíquico de sus propiedades dentro de sus limitaciones humanas y mentales. Cuando dejen de poder hacerlo o cuando por algún motivo deje de agradarles sentirse responsables por la vida de otra persona, dejarán de hacerlo con toda naturalidad ya que el rol está al servicio de la persona y no debería ser nunca al revés.” (Extraído de www.circulobdsm.org)

Al aceptar al sumiso bajo su poder, el Dominante pasa a tener una gran responsabilidad en sus manos, aunque esta aumenta o disminuye en función del grado de entrega de su sumisa. 

No se debe elegir a una persona sumisa sin estar completamente seguro, tiene que ser algo meditado,ya que en el sumiso solo buscará la satisfacción del Dominante.
Este evaluara el nivel de entrega, los gustos y deseos del sumiso, personalidad y límites, rasgos que deben ser de su gusto como cualquier relación vainilla, ya que no adopta a un sumiso, sino a una persona completa y si esta persona no es de su agrado, lógicamente la relación no prosperará.
Aparte de estas características muy propias de cada quién, el sumiso puede ser moldeado en los otros aspectos por el Dominante, pero sin alterar su verdadera esencia.
So re todo, SOBRE TODO, y repito, SOBRE TODO, debe haber respeto y confianza, muchos pseudo Amos suelen creer que por ser lo que ellos llaman “Amos” pueden disponer de cualquier persona sumisa a su antojo y llamarlos con los adjetivos que deseen. Pues NO, el respeto se gana, seas sumiso, Dominante, switch, spanker, etc; el respeto se gana y punto, no por ser un Dominante quiere decir que cada sumiso debe rendirte devoción y pleitesía, acatar tus órdenes y estar a tus pies sin saber ni quién eres, sin antes haberse entregado y haber llegado a un acuerdo, no es así, EL RESPETO ES LO MAS IMPORTANTE
Muchos creen que al auto proclamarse Amos, pueden llegar a conseguir sexo fácil y duro y repito, el BDSM no es eso.

El respeto entre Dominantes debe ser el mismo, no se debe buscar usar a una persona sumisa que ya tiene Dueñ@ y si se desea, se le debe comunicar a el propietario de esa persona y llegar a un acuerdo entre Dominantes y si la otra parte desea prestar a su sumiso (mientras no esté en los límites del sumiso), lo hará.

Un Dominante, debe conocer muy bien a su sumiso, pues dispondrá de el en diferentes niveles. 

Al conocer los gustos, límites y sentimientos de su sumiso,  puede llevar a cabo una mejor dominación, puede identificar los problemas del sumiso y ayudarlo para superar estos, también puede ser una guía para crecer como persona, descubrir nuevas experiencias e incluso conocerse más individualmente.
Yo opino que el primer encuentro debe ser “vainilla”, es decir, no se puede pretender dominar, adoptar, someter, sesionar y humillar desde la primera vez que se conoce al sumiso, como toda relación, antes de iniciarla hay que conocerse, como personas.
La sinceridad debe ser también una característica fuerte de la persona Dominante, se valora mucho la claridad y transparencia, aclarar qué tipo de relación desea, para así poder establecer límites con más facilidad y que la persona sumisa sepa a qué atenerse. Si hay algo que destaque en este tipo de relaciones es la sinceridad.

La comprensión es importante, ya que muchas veces la persona sumisa tiene ciertos límites que les cuesta superar, también hay situaciones en las que un sumiso no puede acatar las órdenes de su Dueño por cosas que están fuera de sus manos y como todos los seres humanos, los sumisos cometen errores, que claro, el Dominante luego corrige como mas le parezca adecuado. 

El Dominante debe primero controlarse, ser Dueño de si mismo, conocerse bien y estar en equilibrio para luego poder dominar a otra persona, tener la potestad de un ser humano en total entrega no es fácil y exige un alto control.

Un Dominante es estricto, tiene carácter para hacerse notar, para hacer sentir su dominación sobre el sumiso, debe tener seguridad en sí mismo, ser de mano dura y castigar cuando debe, de igual manera saber cuándo es el momento de premiar a su sumiso, mecerlo con mimo, cariño y ternura. 

De esta manera con incentivos y castigos ya sean mentales o físicos, se moldea poco a poco a la persona sumisa, este proceso es bastante satisfactorio para ambas partes pues se pueden evaluar los avances y el crecimiento de la persona sumisa. 
No cualquiera puede ser Dominante, este debe contar con una gran inteligencia, intuición y ser detallista, el Dominante es sinonino de poder, superioridad de todo tipo y autoridad ante los ojos de un sumiso y muchas veces de misterio. 
Cuenta con todas estas armas y muchas otras para satisfacer sus deseos y fantasías, con el servicio de su sumiso. 
Llevando de su mano al sumiso o sumisa, la persona Dominante puede darle un gran placer e incluso hacer que el sumiso desee romper ciertos límites que antes tenía, deseará experimentar, hacer su entrega cada vez más profunda y plena, complacer a su Dueño, a su antojo, realizar sus órdenes y caprichos y esa será, irremediablemente, su mayor satisfacción.

Ya sea azotando, atando, torturando, humillando o usando a su sumis@, llevándol@ a sensaciones extremas, haciendo que gima de placer, grite de dolor o llore sin piedad, un Amo siempre sabe que es lo mejor para su sumis@, que este será feliz con lo que recibe, y al ser así la entrega será plena y confiará el sumiso con los ojos cerrados en su Dueño. Un Dominante puede usar como quiera y cuando quiera a su sumiso para su placer y ahí está la felicidad del sumiso, todo esto dentro de los límites antes estipulados.

2 comentarios:

Amo_51 dijo...

Soy Amo, lo soy desde hace 29 años y francamente, admiro lo claro que tienes todo lo que se cuece en este mundo, la crudeza y transparencia con la que explicas todo. La gente adorna lo bonito y tapa lo oscuro por kiedo a que se les tache de desequilibrados, pero a ti...a ti parece que te de igual... Mi sumisa, por ejemplo, no saldria ni loca con collar a la calle y eso me hiere, y al leerte tengo la sensacion de que eres una sumisa sin limites...eso ya no se encuentra. Lo se muy bien.
Me gustaria que publicases algo sobre el dolor, los castigos, algo que sea duro, como lo es el bdsm. Consigue removerme por dentro y te visiraré diariamente como tu mas fiel lector.
Me agradaria mucho, es dificil encontrar algo claro y crudo.

Anónimo dijo...


Hola, tengo a mi marido y es mi sumiso, estoy de acuerdo en muchos aspectos con lo que escribes, sobre todo el respeto entre ambos...he sido su dominadora por mucho tiempo, pero le tengo un gran respeto y cuando se lo merece lo complazco un poco para que su autoestima no se vea afectada. La idea no es destruirlo como ser humano, sino que ambos disfrutemos cada uno en su postura. A él le gusta que yo lo castigue y hacer todo lo que yo le pida, a mi someterlo a mis caprichos. Eso no significa que no lo ame, ambos nos gusta el rol que desempeñamos y lo disfrutamos... Es por eso que llevamos muchos años y cada día es mejor!!!!!